Depilación láser diodo

Estos es lo más importante que debes saber si quieres empezar un tratamiento de depilación láser:

– No haberte depilado con cera, máquina o pinzas al menos 4 semanas antes de la sesión. Mientras tanto puedes eliminar el vello no deseado rasurando con cuchilla.

– No haber expuesto al sol las zonas a depilar por lo menos 5 días antes de la sesión. Así nos aseguramos de que la melanina de la piel no esté activa y la sesión pueda llevarse a cabo con total seguridad.

– No usar medicamentos fotosensibilizantes. En caso de estar tomando algún medicamento y si tienes cualquier duda, consúltanos siempre antes.

– Si eres mujer, no puedes estar embarazada ni dando el pecho.

Hay muchos factores que influyen en el número de sesiones que vas a necesitar y que nos impiden saber de antemano el número exacto, como por ejemplo la zona a tratar, tipo de piel y color del pelo, edad, sexo, factores hormonales, etc. Si es cierto que personas con fototipos más bajos (piel clara) y color del pelo más oscuro, son las que generalmente menos sesiones van a requerir.

En general, para eliminar el vello corporal serán necesarias entre 8/10 sesiones para mujeres de +25 años, entre 6/8 sesiones para +35 años y entre 8/10 para hombres.

El vello facial, al ser normalmente de origen hormonal, van a ser necesarias más sesiones.

Los resultados son visibles desde la primera sesión.

A nosotros nos gusta utilizar el término permanente, ya que el láser va a destruir los folículos pilosos que estén activos durante el tratamiento, y éstos no volverán a crecer.

Hay que tener en cuenta que folículos que estaban inactivos, a lo largo del tiempo se pueden activar, por lo que puede aparecer pelo nuevo. Por esta razón, aconsejamos al menos una sesión de recordatorio una vez al año.

Es indolora para la mayoría de las personas gracias a la tecnología con la que cuenta el equipo. La puntera del láser se enfría entorno a los -8ºC logrando así minimizar las posibles molestias durante la sesión. No obstante, es posible la sensación de calor y sentir unos pequeños pinchazos.

Para el vello corporal dejamos pasar al menos dos meses, tiempo mínimo necesario para que el vello se active y la sesión sea lo más eficaz posible. En cambio, para el vello facial dejaremos pasar solamente un mes, por su origen hormonal. Estos intervalos de tiempo se van aumentando cuando el pelo se va debilitando y va reduciendo la cantidad. También se tomarán en cuenta las necesidades particulares de cada persona.

Hidratarte es fundamental para que la piel no sufra en exceso por la aplicación del láser.

Debido a que el láser destruye la raíz del vello, es necesario rasurar la zona a tratar el día antes de la sesión para evitar irritaciones cutáneas. Solamente en la primera sesión pedimos dejar una pequeña zona sin depilar para que así la profesional pueda valorar el tipo de pelo que tenemos.

El día del tratamiento se requiere acudir con la piel limpia, sin cremas, aceites corporales, desodorante con alcohol, maquillaje, etc. y con ropa tapada y holgada.

Los 2 días siguientes necesitarás una hidratación intensa, evitando actividades que puedan irritar la zona, como practicar deportes intensos, sudar mucho, y tampoco tomar baños con agua muy caliente.

Pasados unos días vas a observar que el vello sale. Es el pelo destruido que es expulsado del cuerpo. Tras 2 o 3 semanas desde la sesión, éste empieza a caerse.

Si lo deseas, puedes rasurar el pelo entre las sesiones, pero nunca usar un sistema que lo arranque.

No puedes tomar el sol ni rayos UVA durante los 5 días anteriores y posteriores a la sesión. Tampoco aconsejamos la aplicación de autobronceadores, ya que activan la melanina.

Es cierto que la lista de medicamentos fotosensibilizantes es extensa, aunque la mayoría lo son a los rayos ultravioletas (los que provienen del sol), por lo tanto no se ven influenciados por la longitud de onda del láser.

Si hay ciertos medicamentos que están contraindicados absolutamente: RACOUTAN, SINTRON, CORTICOIDES, CORTISONA, ANTIBIÓTICOS.

Ante cualquier duda, debes consultarnos antes de realizar la sesión.

Te puedes depilar todo el cuerpo excepto zonas de mucosa, por debajo de las cejas (por estar muy cerca de los ojos), el cráneo y el escroto.

No es posible depilarse sobre los tatuajes, porque la tinta absorbería la luz del láser provocando una quemadura en la piel. La profesional delimitará un área de seguridad a su alrededor, y lo tapará como medida extra de precaución.

Igual que pasa con los tatuajes, los lunares tampoco se pueden depilar. Es por ello por lo que se tapan pintándolos con un lápiz blanco para evitar que absorban la energía del láser. Si tienes cualquier duda consulta con la profesional.

Te puedes depilar con total seguridad, siempre con la autorización de tus padres o representantes legales. Debes tener en cuenta que todavía te estás desarrollando, por lo que cambios hormonales pueden afectarte al crecimiento del vello, y posiblemente necesitarás más sesiones. En todo caso, para las mujeres se recomienda haber tenido la primera regla.